La fiesta de Pinos se queda sin Casa Mieres
Decenas de personas participan en la Fiesta en el Puerto de Pinos, en la provincia de León.
Natalia IGLESIAS Los mierenses fueron ayer «sin techo» en la tradicional fiesta ganadera del puerto de Pinos. Por primera vez en más de medio siglo, los romeros no pudieron disfrutar del bar de Casa Mieres, ya que hace unos meses, la Junta de Castilla y León decidió cerrar el inmueble al considerar que se encontraba en situación irregular. Aunque el Ayuntamiento mierense, propietario del puerto en territorio leonés, instaló una carpa y una barra para asistir a los visitantes, la fiesta no fue la misma.
La cita comenzó con la misa en honor a la Virgen de las Nieves, que estuvo oficiada en la capilla del puerto por Nicanor López, párroco de la iglesia de San Juan Bautista de Mieres. Los vecinos y visitantes fiesta pudieron disfrutar a posteriori de una sesión vermout amenizada por música de gaita y tambor, tras la que llegó la hora de la confraternización y la comida. Tortillas, empanadas y caldereta de cabrito fueron los protagonistas del menú en el puerto de Pinos. Por la tarde, la música disco amenizó la jornada festiva.
Todos los asistentes coincidieron ayer en la bajada de público. «La fiesta ya no es lo que era, hace 40 años esto estaba lleno, no como ahora», relataba Eledina Delgado, una mujer asidua a la fiesta. Aunque tampoco echó de menos a una que nunca falta a la cita, la lluvia. «Este año parece que nos está dando una tregua», bromeó Delgado. Los asistentes a la fiesta ganadera no sólo llegaron de este lado de la «frontera». José Luis Valcarce y su familia, vecinos de la localidad leonesa de San Emiliano, también acudieron, aunque de casualidad. «Vinimos a pasar el día, pero no sabíamos que la fiesta era hoy. La verdad que el bajón de gente respecto a otros años nos sorprendió», aseguró sorprendió Valcarce.
Hubo tiempo también para hablar sobre la polémica que desde años mantienen el Ayuntamiento de Mieres y las Juntas Vecinales de Pinos por los derechos de pasto, y también por las instalaciones que el consistorio asturiano posee en el monte. En esta edición, la vista estuvo puesta en la Casa de Mieres. La Junta de Castilla y León ordenó hace unos meses el cierre del inmueble. La instalación contaba con un bar para los ganaderos que fue cerrado por estar construido en una situación «irregular». La orden no gustó a los vecinos, quienes aseguran notar la falta del bar. «Antes venías con el ganado y podías quedarte a pasar el día, ahora sin el bar ya no se puede», aseguró Pilar Fernández, de Mieres.
El concejal de Medio Rural mierense, Juan José Menéndez, aseguró ayer que el proceso para la legalización de la Casa de Mieres está ya en marcha. «Estamos a la espera de que nos autoricen la reapertura de las instalaciones», aseguró el edil, que subrayó la importancia que tiene el puerto de Pinos y el bar para los ganaderos de Mieres.
Entre los asistentes, se encontraba la directora general de Ganadería, María Rosa Urdiales, y el alcalde mierense, Aníbal Vázquez.